Una sesión fotográfica de quince años divertida y enriquecedora, fue lo que vivimos con Sofia acompañada sus padres en un lugar cómodo y agradable como lo son los jardines de su conjunto residencial.
Al principio de esta sesión se notaron los nervios, muy comunes a la hora de sus poses, pues ella, como la mayoría de las quinceañeras no están acostumbradas a posar frente a una cámara, pero con nuestra ayuda hicimos que todo funcionara haciendo este rato mas divertido y relajado y generando la confianza para que todo fuera un éxito.
Finalmente mostramos el producto final después de algunos retoques y esta familia quedo fascinada con las fotos y con ganas de una ¡sesión familiar!